Los modelos de mercado han cambiado mucho en los últimos años y no se puede negar el exponencial aumento de negocios que hoy se desarrollan exclusivamente en línea.
La venta de arte ha sido un sector que se ha resistido largo tiempo a caer en la tentación de este mundo virtual
Esto se debe en gran medida a la importancia de la conexión emocional entre el comprador-coleccionista y la pieza, así como la necesidad de tener certidumbre sobre la autenticidad, veracidad y autoría de las obras ofertadas. Sin embargo, poco a poco la permanencia en el modelo de negocio tradicional encuentra sus excepciones y hoy existen varias casas de subastas y galerías que se dedican exclusivamente a la venta en línea.
A pesar del temor que este tipo de operaciones pueden generar, las garantías legales que hoy dan soporte a los negocios por Internet deben ayudarnos a disipar las dudas al respecto. No obstante, el arte es un sector muy delicado porque los objetos que se ofertan son únicos y los compradores necesitan garantías para no sentirse defraudados o ser objeto de algún engaño.
Las consultas más frecuentes con relación a la compraventa online son:
► ¿Qué garantías me puede ofrecer el vendedor?
► ¿Cómo puedo presentar una reclamación o devolver una pieza?
► ¿Qué sucede si la obra que se compra no es lo que se esperaba?
► ¿El régimen fiscal es el mismo en las compras online?
► ¿Cómo trabajan las casas de subastas online si deseo vender alguna obra de mi propiedad?
► ¿Es segura la compra online internacional?